lunes, 9 de marzo de 2009

Cartas a Pepe Blanco: "Un año que demuestra el compromiso del PSOE con los españoles"

(insertat en: https://www.blogger.com/comment.g?blogID=34392934&postID=8187854780989968617&page=1) Acabo de dejarle en su blog, a Jordi Sevilla, algunas sugerencias frente a la crisis. Y sinceramente, creo que tod@s podemos hacer un poco más. La motivación para hacerlo debería salir de cada uno de nosotros, pero mira por donde, la única forma de echar el carro a rodar, es a través de las formaciones políticas.
Y ello es así porque son quienes nos representan en los Parlamentos (del ámbito que sean: europeos, estatales, o autonómicos). Y nuestros Gobiernos, nos gusten más o nos gusten menos, deben canalizar y dirigir una parte importante de esta sociedad, las Administraciones.
Aplíquense tod@s a gobernar, y déjense de confeccionar trajes, algunos. Tenemos aquí ya, las Fallas, pero después de la Cremá, y de mandar al carajo todo lo malo y nefasto de nuestra sociedad, está ahí delante otro duro día de esfuerzo y lucha por seguir adelante.
No hace falta que del otro lado del océano nos lancen consignas, como el ‘juntos podemos’; pero ya que esta frase se ha hecho tan popular, que sea de verdad, pero añadiendo el ‘Todos’. “Todos juntos podemos”. Pero si también tod@s nos aplicamos, mejor.

Un saludo desde Xàbia/Jávea.

Cartas a Jordi: “¿Y si el pozo no tuviera fondo? "

(insertat en: http://blog.jordisevilla.org/2009-03-08/%c2%bfy-si-el-pozo-no-tuviera-fondo-publicado-en-mercados-de-el-mundo/ ) El aforismo de “no te preguntes qué puede hacer tu país por ti, sino qué puedes hacer tu por tu país” queda ante la realidad de las cosas, y ante la desorientación identitaria, en algo así como una frase ocurrente.
Sin embargo, si existen comportamientos y acciones que pueden ser de utilidad para que el entorno inmediato en el que nos desenvolvemos, sienta con menor rigor los efectos de la “crisis sistémica global” o crisis de la leche.

Ya sabemos que a determinados colectivos, esta crisis les afecta más bien como ‘observadores curiosos y mordaces comentaristas de su entorno’. Y a estos especiales observadores, que podría ser por ejemplo, unos cuantos millones de españoles empleados por las AA.PP. (Administraciones Públicas), yo les pediría, a ellos, y a quienes legislan las leyes y nos representan, no que congelen sus retribuciones, sino que simplemente, tomen alguna de las siguientes medidas (o todas):
- Cotización por desempleo de tod@s l@s emplead@s públic@s.
- Paralización de las gratificaciones por servicios extraordinarios.
- Moderación de la concesión de productividad.
- Consolidación del empleo temporal en todas las AA.PP.
- Revisión y homogeneización de las tablas retributivas de todos los empleados públicos, en especial de todos aquellos, que sobrepasen los máximos establecidos para el Complemento Específico, de la Administración del Estado –AGE-.
- Gestión directa de obra y servicio público, mediante contratos de duración determinada.

Al Tribunal de la Competencia, le exigiría que despertase, y en cooperación con el Ministerio de Trabajo, y los Agentes Sociales, se estableciera por una vez un marco retributivo en todo el Estado, en determinados servicios, como la recogida y tratamiento de residuos sólidos, ergo basura, en el que todos los municipios y ayuntamientos están al chantaje ocasional de las empresas del sector (no más de 10 en toda España). ¿Por qué debemos permitir este comportamiento quasi delictivo y quasi mafioso, que al final repercute en el bolsillo de todos los ciudadanos?

Al Ministerio de Industria y Energía, le exigiría que se dejara de papanachas con bombillas de bajo consumo, y que de una vez por todas, se pongan las ‘pilas’. ¿Qué pasa que no apoyamos la producción doméstica de energía fotovoltaica, en los hogares españoles, mediante un precio competitivo de venta de KW/hora producido? Esto si sería de verdad una ayuda a miles y miles de economías domésticas y hogares. Que pasa, que las cuentas de resultados de las eléctricas no son tan abultadas, … o que las cuentas de las entidades financieras a su vez accionistas y con acción de dominio sobre aquellas, no reparten tantos dividendos,… pero si ya tenemos vendida las joyas de la corona a países terceros. Si, esos que están tomando posiciones de cara al futuro inmediato energético (Italia, Rusia, Alemania, …)

Al Ministro de Transportes y Telecomunicaciones, le haría examen de conciencia, y propósito de enmienda de la dejadez en el campo de la liberalización real del precio y servicios de las telecomunicaciones. ¿Por qué un servicio básico en la actualidad, como el uso de redes de información y comunicación –internet- tiene los precios prohibitivos que tiene en España, cuando en USA, y resto de Europa, su coste es infinitamente menor?.

Al Ministerio de Educación le preguntaría, que se está haciendo para que formemos a muchos más y mejores ‘profesionales’ en oficios, y trabajos como las energías alternativas, las nuevas tecnologías, los servicios a la comunidad y geriátricos, etc… ¿Con que medios están estudiando los futuros profesionales?

Al Ministerio de Sanidad, le exigiría un control más severo de la gestión privada que se ha puesto de moda, por ejemplo respecto de la ‘derivación de enfermos a centros de según que empresas’, o de dejar en manos y beneficios privados los servicios y atenciones que suponen un mayor margen de beneficio, dejando el lastre de los pacientes de larga duración y/o hospitalización para los centros públicos. ¿Qué no ganan bastante quienes negocian con nuestra salud? ¿No tienen bastante con aplicar sueldos inferiores, y jornadas de trabajo más largas? ¿Por qué se permite la privatización de los aspectos rentables de la sanidad de los españoles, a ‘amiguetes’, y siempre ‘socializamos’ los no rentables?. ¿Otro INI en la sanidad?

¿Quién controla la ingeniería contable con la que se esconde la deuda pública de las Comunidades Autónomas? ¿O es que la deuda de CIEGSA, en el caso valenciano, es también una fábula?. ¡Señores, que estamos hablando del dinero de todos!

Y que no engañen algunos, lo que se digo de los Ministerios, es ‘idem’ de las Comunidades Autónomas con competencias en las materias; o de muchas Administraciones Locales (que las Diputaciones y demás, también lo son).

Y suma y sigue…