sábado, 11 de octubre de 2008

Responsabilidad social y política de las empresas: el caso Saez-Merino


Hoy sábado me desayuno con algunas noticias como ésta: “La familia Sáez Merino controlaba la marca Lois (y Cimarrón, Caroche y Caster) a través de una firma radicada en un paraíso fiscal” (la isla de Madeira en Portugal-).

No me quiero encarnizar con esta empresa, pero a modo de ejemplo, ¿Cuántos millones de euros ha recibido de las Administraciones? ¿Cuántos millones en ayudas y subvenciones, a la exportación, para la formación, para la consolidación de empleo, para mantener las fábricas en territorio español, … etc han recibido, o se han beneficiado?
Nota a navegantes cibernautas: Las dos fábricas que tenían en territorio español, la de Daimiel en Ciudad Real, y la de Benaguasil, en la comarca del Camp de Turia, CHAPAN (echan el cierre) y se quedan en la calle, a los últimos 342 trabajadores. Antes ya cerró en Benifaio.

Que yo sepa, la marca es parte del valor de la empresa, de su activo, y posiblemente el más importante.

Estos empresarios?, emparentados con el señor Pedro Agramunt (PP), les parece que es de recibo (como dirían nuestros mayores) que se vayan de rositas, descapitalizando la empresa, llevándose a paraísos fiscales lo que debería quedar en prenda o fianza antes de que echen el vuelo o la travesía, por un mar de flores, hacia un descanso dorado, con sus caballos, y sus jinetes.

Creo que parte de la responsabilidad social que esta empresa tiene con la sociedad valenciana, es al menos exponencial al dinero recibido de las arcas públicas. Y repito, esta empresa, no es sino un ejemplo más.

No se es de España sólo porque lo ponga un logo. Y por cierto, lo de "made in Spain", quítenlo, y tengan la decencia de que aparezca Marruecos, Brasil, o Taiwan...

Otra cuestión será ante nuestros gobernantes europeos el ¿cómo podemos permitir paraisos fiscales entre estados que conformamos la Unión Europea? Ya está bien de oscuros Gibraltares, o desconocidas Madeiras.